Dios nos ha provisto de armas poderosas para crear una atmósfera de sanidad y milagros aún en las situaciones más tempestuosas. Kenneth Copeland nos enseña cómo hacerlo, y nos comparte uno de sus testimonios más entrañables.
Dios nos ha provisto de armas poderosas para crear una atmósfera de sanidad y milagros aún en las situaciones más tempestuosas. Kenneth Copeland nos enseña cómo hacerlo, y nos comparte uno de sus testimonios más entrañables.