Dios está comprometido con su palabra, ya que él no puede mentir. Por eso como creyentes nacidos de nuevo, debemos creer que podemos hacer y tener lo que dice su palabra, a pesar de la incertidumbre y el caos que hay en el mundo.
Dios está comprometido con su palabra, ya que él no puede mentir. Por eso como creyentes nacidos de nuevo, debemos creer que podemos hacer y tener lo que dice su palabra, a pesar de la incertidumbre y el caos que hay en el mundo.